Aunque la venta de leche de almendra se está generalizando en los supermercados, nada mejor que prepararla uno mismo en casa.
Las recetas sobre la elaboración de la leche de almendras existen ya desde hace tiempo, y se pueden encontrar tanto en libros como en Internet. Por lo tanto, esta no es ninguna idea original mía.
Dicho esto, he encontrado esta versión de receta que me parece bastante buena en los resultados, tanto en sabor como en textura, después de haber experimentado varias de ellas.
Cantidades a emplear para obtener 4 tazas de leche de almendra
INGREDIENTES:
1,5 tazas de almendras puestas en remojo (véase la nota sobre cómo ponerlas en remojo)
4 tazas de agua fría
1/8 de una cucharadita de sal
INSTRUCCIONES:
Mezcle las almendras, el agua y la sal en una licuadora. Póngala en funcionamiento durante un minuto.
Cuele el líquido obtenido con una gasa o tamiz, colocado en un recipiente grande. Si desea que la leche obtenida sea más suave, repita este proceso otra vez.
¡Y ya está!
NOTAS MUY IMPORTANTES:
Se puede hacer esto con cualquier tipo de semilla, por ejemplo con nueces (delicioso), con anacardos, avellanas e incluso semillas de cáñamo.
La relación entre la cantidad de frutos secos y el agua va a determinar la textura y la consistencia del producto que vamos a obtener. Para una leche más cremosa, disminuir la cantidad de agua. Para obtenerla más líquida, aumentar la cantidad de agua. ¡Experimente la proporción que más se ajusta a sus gustos!
¡Pruebe diferentes aromas! Uno de mis aromas favoritos es agregar 2 cucharaditas de extracto de vainilla y media cucharadita de canela antes de la mezcla, o también se puede añadir 1 cucharada de cacao en polvo. ¿Qué tal las fresas? Se meten un puñado de fresas en la licuadora después de haber de triturado las almendras. Otras sugerencias: medio plátano, uno o dos higos o dátiles picados.
El contenido en grasa y fibra de la leche de almendras no es igual al que contienen las almendras para elaborarla. Después de colar la leche, verá que en el tamiz queda una cantidad considerable de materia sólida de la almendra ( que dicho sea de paso, se puede mezclar con cacao en polvo, coco rallado, y luego se pone en la bandeja del horno y se obtiene un magnífico aperitivo).
Para obtener un mejor resultado (y mejor sabor) le recomiendo remojar las almendras colocándolas en agua durante unas 8 a 12 horas antes, asegurándose de cubrir por completo las almendras con el agua. Luego se quita el agua, se lavan las almendras, y ya se puede hacer la leche.
La leche así obtenida se puede guardar durante tres días en el frigorífico. Su uso es muy versátil, ya que se puede añadir al café, tomar con cereales o en batidos.